lunes, 1 de octubre de 2007
LOS MUERTOS Y EL HALLOWEEN
Investigación: Ernesto Rosas
Nuestro país esta lleno de tradiciones que invalidan la Palabra de Dios. Jesús enfrentó el engaño y la influencia de la tradición en su tiempo como lo relata el evangelio según Mateo 15:1-20.
La mayoría de las personas no saben realmente cual es el trasfondo de las fiestas religiosas que celebran año tras año sin consultar la máxima guía para el cristianismo que es la Biblia. Es más fácil seguir los argumentos humanos que la voluntad de Dios.
El Halloween y el día de Muertos son fiestas paganas que no tienen nada que ver con el verdadero cristianismo plasmado en las Escrituras. Por la falta de conocimiento el pueblo mexicano ha caído en las garras de la tradición y del satanismo disfrazado que proclaman su doctrina anticristiana – Oseas 4:6, 1 Timoteo 4:1 –
La presente investigación no pretende atacar alguna religión en especial, simplemente es una información recopilada históricamente para confrontarla con la luz de la Biblia. Finalmente usted tomará su propia decisión.
Y usted, ¿A quién le cree?, ¿A Dios o a la tradición humana?
Los Muertos y el Halloween - Investigación
Fuente: www.poderenlinea.com
La celebración del día de muertos es una mezcla de devoción mística y religiosa con tradiciones comunicadas por nuestros antepasados mexicanos desde hace más de 3000 años. Miles de personas en México cada 1 y 2 de noviembre esperan recibir las almas de sus difuntos con veladoras, imágenes de santos y alimentos en sendos altares preparados específicamente para ellos. Se llora en los panteones y se festeja en las casas esperando que las ánimas de los difuntos vuelvan y "pachangueén" con los vivos, mientras se va de casa en casa pidiendo "calaverita". Se regalan dulces con formas cómico-macabras y se recitan poemas burlones donde la muerte es principal actriz.
El Halloween es una fiesta de carácter religioso y místico, con sus más primitivos orígenes en los pueblos celtas de hace miles de años. Hoy en día se espera que en ella lo misterioso, diabólico y oculto conviva con los humanos. Todos festejan disfrazados de espantos y se busca de casa en casa dulces de regalo, mientras los niños disfrazados que lo hacen gritan "Trick or treat". Esto sucede el 31 de Octubre y ese día nadie trabaja. Todos, o casi todos, festejan al mal y la muerte entre cuentos de horror, decorando sus casas con las famosas "Jack o' Lantern" o "Linternas de Jack", que son calabazas vaciadas con rostros tallados e iluminadas por dentro con una vela encendida.
Los niños de muchas partes del mundo esperan ansiosamente este día, pues se disfrazarán y les regalarán dulces. En los hogares habrá decoración y se "compartirán" los alimentos con los muertos. Es un día de fiesta.
Pero ¿Todo es tan bueno cómo se ve? ¿Podemos vencer a la muerte con reírnos de ella, comiendo una calavera de dulce y haciéndole poemas y canciones? ¿Puede un inocente disfraz enfrentar a nuestros hijos con lo malo y oculto?
Con esta investigación no esperamos echarle a perder su fiesta o amenazar la tradición cultural transmitida por generaciones. Creemos que existen verdades ocultas detrás de estas celebraciones y todos debemos de conocerlas para tener un criterio amplio y entender por completo lo que significa y representa algo como el Día de muertos o el Halloween.
¿Qué pensaría si le dijera que éstas fiestas tienen un verdadero origen maléfico, que existen sociedades ocultas que se benefician de que usted las celebre y que no es sino una trampa para su propia alma?
Esta es la verdad. Analizando la tradición a través de un libro que usted, yo y millones de personas consideramos la verdad más confiable del mundo: La Biblia.
I. Origen Histórico
1. Origen del Halloween
Aproximadamente trescientos años antes del nacimiento de Cristo, los celtas vivieron en las Islas Británicas, Escandinava, y Europa Occidental. Eran una sociedad como cualquiera de las de hoy, pero sus usos y costumbres fueron controlados por una sociedad de sacerdotes paganos llamada los druidas.
Ellos adoraban y servían a Samhain, dios de la muerte. Cada año, el 31 de octubre, los druidas celebraban la víspera del año nuevo céltico en honor de su dios Samhain.
Las raíces paganas de la celebración se atribuyen a la celebración celta de «Samhain» del culto a los muertos. Se trata de una tradición anterior a la invasión de los romanos (46 a. C.) en las Islas Británicas enmarcada en la religión de los druidas en Inglaterra, Francia, Alemania y en los países Célticos.
Si bien se sabe poco de estas celebraciones, parece que las festividades del Samhain se celebraban muy posiblemente entre el 5 y el 7 de noviembre (a la mitad del equinoccio de verano y el solsticio de invierno) con una serie de festividades que duraban una semana, finalizando con la fiesta de «los muertos», que daban inicio al año nuevo celta.
En esta fiesta, los druidas, a manera de médium, se comunicaban con sus antepasados esperando ser guiados en esta vida hacia la inmortalidad. Los Druidas creían que en esa noche en particular los espíritus de los muertos regresaban a sus antiguos hogares para visitar a los vivos. Y si los vivos no proveían comida a estos espíritus malignos, toda clase de cosas terribles podrían ocurrirles. Si los espíritus malignos no recibían un festín (treat), entonces ellos harían travesuras malas a los vivos (trick).
Trick-Or-Treat, Treta o Trato
Los sacerdotes druidas iban de casa en casa exigiendo alimentos y en algunos casos niños y vírgenes para ofrenda a su dios Samhain en el festival de la muerte, si se los daban se hacía un trato (treat) y se iban en paz. Si la gente de la aldea no daba a los druidas el alimento o persona que exigían, se lanzaba una maldición sobre la casa entera y según ella, alguno de esa familia moriría ese año. Esa era la trampa o treta (trick).
Jack o’ Lantern
Los druidas llevaban con ellos un nabo grande, el cual habían ahuecado en el interior, con una cara tallada en el frente, para representar el espíritu demoníaco del que recibían su poder y conocimiento, mismo que se encargaría de ejecutar toda maldición e iluminar su camino. Este espíritu se llama "espíritu familiar". El nabo, encendido por una vela dentro, era una linterna para los druidas por la noche. Ellos llamaron "Jock" al espíritu de la linterna.
Cuando estas prácticas llegaron a Norteamérica en los siglos 18 y 19, los colonizadores hallaron que los nabos no eran tan grandes, así que los substituyeron por calabazas. Desde entonces a esta figura tan representativa del Halloween se le llamó "Jock, el que vive en la linterna" y después vino a ser "Jack o’ Lantern" o Linterna de Jack.
2. Origen del Día de muertos
En México, la costumbre de rendir culto a los muertos se practica desde la época prehispánica, desde el año 1800 antes de Cristo. En las Fiestas de "difuntos" se ponían ofrendas que bien podían ser un homenaje, un presente o el ofrecimiento de un sacrificio.
Para los antiguos mexicanos lo que determinaba el lugar dónde transcurriría su vida después de morir era principalmente las causas o la forma en que morían. Ellos creían en varios paraísos y varios infiernos (que no tenían significado "moral"). Es decir, un mundo superior para los vivos y otro inferior para los muertos.
Según el Códice Florentino y el texto de la Historia General de las Cosas de la Nueva España estos mundos eran los siguientes: El Tlalocan, de Tlaloc (dios del agua y la lluvia), donde iban los que morían por causas del agua; el paraíso oriental, hogar de los guerreros, de los caídos en batallas y de los sacrificados al sol (Tonatiuh); el occidental que era el hogar de las mujeres que morían en el parto (las Cihuateteos) y el paraíso del sol que era llamado Tonacalli.
Los muertos que no eran elegidos para habitar en los otros paraísos, iban al Mictlan (lugar de los muertos), o mundo inferior. En él reinaba Mictlantecuhtli y la reina Mictlancihuatl (señora del lugar de los muertos). En este mundo se establecían todos los que morían por muertes naturales no relacionadas con las otras moradas.
3. La ofrenda a los muertos
Para llegar al Mictlan se debían vencer múltiples retos: 4 días de viaje entre montañas que chocaban para aplastar al viajero, una feroz lagartija gigante, un cocodrilo monstruoso, 8 desiertos, 8 colinas, un viento helado, cuchillos lacerantes y un río llamado Chiconahuapan, mismo que debía cruzar montado en un perro Itzcuintle sin manchas.
Para resistir este viaje, tanto el día de su muerte como durante las festividades de los muertos se les otorgaban ofrendas que les proporcionaban fuerza para su tránsito al inframundo; alimentos, agua, sal, juguetes para los niños y el perro en el que viajarían por el río Chiconahuapan.
II. El significado oculto
1. Halloween
La fiesta de Halloween, es decir "el festival de Samhain", todavía es hoy celebrado oficialmente por los satanistas, ocultistas, y adoradores del diablo como la víspera del año nuevo de la brujería.
Las fechas importantes para los satanistas, según la iglesia satánica relacionista, son:
Febrero 2: Noche de candelas.
Marzo 21: Equinoccio de la primavera.
Abril 13: Cumpleaños de Satán.
Abril 30: Inicio de la estación esotérica.
Julio 24: Tercera noche de tregenda. Se profieren maldiciones y maleficios contra enemigos.
Julio 31: Rechazo de la influencia de los maleficios externos.
Septiembre 29: Equinoccio de otoño.
Octubre 31: Día de Satanás. Inicio año nuevo satánico.
Diciembre 21: Primera noche de tregenda, mezcla de ritos demoníacos con ritos de paganismo precristiano.
Según la página web oficial de la iglesia de Satán, cada satanista debe de vestir ropas de halloween el día de su cumpleaños y para ciertas ceremonias. Cada que se visten ropas de halloween se está participando en prácticas ocultas dedicadas a Satanás.
Cierta página de Argentina (que no vamos a mencionar) dedicada al culto a Satanás coloca un texto extraído y traducido de "The Satanic Bible", por Anton Szandor LaVey, que acerca del halloween dice:
"Se decía que los malos espíritus, fantasmas, brujas, hechiceros, etc. estarían ejercitando sus "artes" de la forma más pomposa y abierta. En esta noche, se decía, la frontera entre el mundo de los vivos y el mundo de los muertos se hacía más frágil. Los viejos tomarían sus precauciones para proteger sus hogares de los poderes de estas entidades mientras que los más jóvenes harían fiestas, buscarían indulgencia en placeres carnales, y buscarían adivinos para que les ayudaran a encontrar su compañero adecuado".
Toda práctica apegada al halloween es de hecho, culto a Satanás disfrazado y preparado para adentrarse en nuestras costumbres.
2. Día de muertos
El día de muertos, del 1 y 2 de noviembre, es usado como un "lazo histórico" que intenta perpetuar las raíces prehispánicas de los mexicanos y muchos pueblos de Latinoamérica y se considera una celebración, que se festeja junto con los días de "todos los santos" y "fieles difuntos" en cada iglesia católica y parroquia del país.
Estas fiestas son dedicadas a todos aquellos que han muerto y que la jerarquía católica considera ya se encuentran en el cielo, que disfrutan de la "presencia de Dios" y que sirven de intermediarios entre Dios y los hombres. A ellos les llaman Santos y Beatos.
También se usan estas fiestas para pedir misericordia para los muertos que no llegan allá aun, debido, según sus costumbres a que se encuentran en el "purgatorio".
Estas fechas se usan también por diversos brujos, ocultistas, tarotistas y adivinadores dentro del contexto de fiestas religiosas para aumentar su poder y control sobre aquellos que practican la fiesta, tal como ya lo vimos.
Cada una de estas noches se invita a los espíritus a comer y beber de aquello que se les ha preparado. Se dice que se llevan el "alma", la esencia de cada alimento. Los colores anaranjados de la flor de "tzempaxuchitl" con las que se decora sirven para que el espíritu sea guiado hasta el hogar donde está la ofrenda y se le "halaga" con los cigarros y bebidas que disfrutaba en vida. A los niños se les sigue poniendo juguetes para que se diviertan.
Las imágenes de santos y figuras religiosas acompañan estos altares de muertos, que si bien son considerados como obras de arte mexicano, son también objeto de culto y veneración para quienes los ponen.
Cuando Dios estableció leyes para su pueblo, claramente ordenó no consultar a los muertos ni participar en ocultismo, diciendo: "No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos. Porque es abominación para con El Señor cualquiera que hace estas cosas...". Deuteronomio 18:10.
¿Por qué entonces la religión permite y participa en estas fiestas? ¿Es que acaso las leyes de Dios han cambiado?
III. ¿Cómo entraron estas fiestas en las creencias mexicanas?
1. Halloween
Cuando Constantino se convirtió en emperador de Roma, dictó una ley que declaraba el Catolicismo como la religión oficial del Estado. Constantino exigió como emperador que cada uno se hiciese católico o enfrentara la pena de la muerte.
"Alrededor del año 609 se transforma el Pantheon de templo pagano, dedicado a todos los dioses, a la iglesia cristiana, dedicada a la Virgen y a los mártires cristianos."
"La tradición celta entró con mayor fuerza en el siglo VIII, cuando la iglesia romana estableció el 1 de noviembre como el Día de Todos los Santos, en inglés "All Saints Day" y anteriormente "All Hallows Day", de donde deriva posteriormente la palabra Halloween que proviene de "All Hallows Eve" que significa precisamente, "Noche de Todos los Santos". Sin embargo, esta tradición europea se difundió más por todo el mundo a través de Estados Unidos, con el desarrollo tecnológico"
"Desde el siglo IV la Iglesia de Siria consagraba un día a festejar a «Todos los Mártires». Tres siglos más tarde, el Papa Bonifacio IV (615) transformó un templo romano dedicado a todos los dioses (panteón) en un templo cristiano dedicándolo a «Todos los Santos», a todos aquellos que nos habían precedido en la fe. La fiesta en honor de Todos los Santos, inicialmente se celebraba el 13 de mayo; fue traspasada por el Papa Gregorio III (741) al 1 de noviembre, día de la «Dedicación» de la Capilla de Todos los Santos en la Basílica de San Pedro en Roma. Más tarde, en el año 840, el Papa Gregorio IV ordenó que la fiesta de «Todos los Santos» se celebrara universalmente. Como fiesta mayor tuvo su «vigilia» solemne (31 de octubre).
Esta vigilia fue llamada por los ingleses «All Hallow's Even» (Vigilia de Todos los Santos). Aquí encuentra su origen el término «Halloween». Por otro lado ya desde el año 998, San Odilón, abad del monasterio de Cluny (en el sur de Francia) había añadido la celebración del 2 de noviembre, como una fiesta para orar por las almas de los fieles que habían fallecido, por lo que fue llamada fiesta de los «Fieles Difuntos» la cual se difundió en Francia y luego en toda Europa."
Las iglesias fueron inundadas con los paganos no convertidos, eran paganos forzados a integrarse a la iglesia católica o perder sus vidas por desafiar al emperador. Los recién agregados traían todas sus prácticas e ideas paganas a la iglesia incluyendo "el festival de Samhain" y exigieron que este festival siguiera siendo parte de sus vidas.
Puesto que la iglesia había fracasado en eliminar las prácticas paganas de la gente, decidió usar "a su modo" algunas de ellas, especialmente este ritual del 31 de octubre. En el siglo IX, el Papa instituyó un nuevo día para ser celebrado por la iglesia el 1 de noviembre, llamándolo "día de todos los Santos" (All Hallows Day). Este día celebra a todos los mártires y santos de la iglesia católica y el 31 de octubre se convirtió en su víspera. Ahora la gente podría tener su festival el 31 de octubre, porque el 1 de noviembre era un día "santo".
La cultura popular llamó a la celebración el "All Hallomas" y con el paso del tiempo a la tarde anterior al 1 de noviembre se le conoció como "All Hallomas Eve", evolucionando poco a poco como "All Hallow's Eve", "All Hallowed Eve", "All Hallow E'en"(evening) y finalmente Halloween.
Pero nada cambió. La observancia pagana continuó el 31 de octubre, y el día de fiesta "cristiano" fue observado el 1 de noviembre. La gente no celebró sus ritos y adoración paganos a los demonios para esta "nueva víspera" establecida por la iglesia.
2. Día de muertos
Los antiguos mesoamericanos precolombinos tenían dos festejos a los muertos: El pequeño y el grande, que de igual manera como se hizo anteriormente con el Halloween, durante la colonia se fusionaron con la cultura y la religión católica para facilitar el involucramiento en su sistema religioso.
La fiesta pequeña se iniciaba 20 días antes que la fiesta grande y era dedicada a los niños; la segunda a los adultos, tal como hacen ahora, que 1° de noviembre se dedica a los niños y el 2 a los adultos. Como el inicio de la celebración de los muertos adultos coincidía con la festividad católica de los fieles difuntos, el día de todos los santos quedaba incluido dentro de los 20 días anteriores a la fiesta grande, donde se encontraban las fiestas de los muertos pequeños. De este modo se siguió con el culto pagano a los muertos bajo el manto protector de la religión.
¿Por qué entonces lo permite la Iglesia tradicional mexicana?
Piense por un momento. ¿Puede alguien volver de la muerte para “convivir” con sus amigos o familiares? La respuesta es contundentemente NO.
Los “médium” y brujos dicen que sí es posible y hasta las personas que salen en la televisión dando los horóscopos lo dicen; pero todos ellos están completamente equivocados, son ignorantes y enseñan superstición y frivolidades a la gente como un estilo de vida. Es más, ellos están separados totalmente de Dios y su fe y enseñanzas tienen un origen diabólico aunque se encomienden a Dios, santos y ángeles.
Yo no lo digo, es Dios mismo quien lo dice. En la Biblia se lee: “No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego (es decir que lo lleva ante brujos, curanderos, espiritistas y médium), ni quien practique adivinación, ni agorero (quien predice el futuro), ni sortílego (que hace pactos o juramentos pecaminosos), ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago (magia blanca o negra), ni quien consulte a los muertos. Porque es abominación (blasfemia) para con Jehová cualquiera que hace estas cosas, y por estas abominaciones Jehová tu Dios echa estas naciones de delante de ti.” Deuteronomio 18:10-12.
¿Por qué Dios no permite consultar a los muertos, ni a los adivinos, hechiceros e incluso los horóscopos?
El apóstol San Pablo escribió: “Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.” Gálatas 5:19-21.
Dios es contundente en ello, nadie que practique este tipo de cosas podrá entrar a su presencia.
Es probable que usted sea una persona religiosa y piense ¿Qué tiene de malo festejar un día del santoral que la Iglesia Católica respeta y celebra? Dios habla muy claramente diciendo que las cosas del diablo y las que sí son de Dios no tienen nada en común y no pueden hacerse juntas.
Sobre ello se lee en la Biblia: “No te unas en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? ¿Y qué concordia Cristo con Belial? (Un dios pagano adorado en esa época) ¿O qué parte tiene el creyente con el incrédulo?” 2 Corintios 6:14.
Es decir: La religión no puede ni debe aceptar la invocación de los muertos, ni su veneración, ni el ofrecerles alimentos, veladoras, juguetes o altares, puesto que es una costumbre de origen pagano y diabólico que ofende a Dios y nos separa de Él, que está prohibida por sus mandamientos que acarrea separación de Dios y quienes la practican.
Este texto no tiene como finalidad promover religión alguna, o condenar a la religión tradicional, si no dar a conocer información documentada que forme el criterio del lector, a quien corresponde tomar su propia decisión.
Muchos afirman que la iglesia tradicional no promueve las invocaciones a los muertos y que no permite estas celebraciones. Sólo hay que ver las grandes fiestas de lugares como Mixquic o Naolinco en México y la importante participación de las parroquias en ellas para confirmar o negar este hecho.
Continuará...