jueves, 5 de enero de 2012

Clase 22 - GC 2011

RESUCITANDO NUESTRO FE

Santiago 2:14-26

La Biblia nos enseña varias historias de resurrección de muertos, tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo. Recordamos al amigo de Jesús llamado Lázaro que experimento el poder de Dios al traerlo a la vida nuevamente, fue algo muy impresionante, porque biológicamente el cerebro no podría responder después de 4 días sin irrigación sanguínea, así como otros órganos, simplemente fue un milagro de Dios, porque para Él no hay imposibles.

(v.14-18) El tema de la fe en la Biblia es muy interesante e importante. El Apóstol Santiago nos confronta con las acciones de la fe, porque es muy fácil decir que tenemos fe, pero del dicho al hecho hay mucho trecho. Directamente nos dice que la fe por sí sola, si no tiene obras, está muerta. Cuando ayudamos a los demás en sus necesidades físicas y no tan solo en lo espiritual, es una forma de demostrar nuestra fe, porque las obras son el fruto de la fe.

(v.19) Creer en Dios no es suficiente porque los demonios también creen y tiemblan al hacerlo, porque saben y reconocen a Dios como el Todopoderoso. El 80% de las personas dicen que creen en Dios aunque no lo conocen, y eso hace la diferencia, porque sus acciones demuestran que realmente no lo conocen. No te conformes con solo “Creer” en Dios, sino en “Conocerlo”.

(v.20-24) Lamentablemente existen los “Cristianos estériles” porque no demuestran que le han creído a Dio a sus promesas y a Su Palabra, porque sus acciones son inseguras y llenas de incertidumbre con la famosa pregunta: ¿Me habrá escuchado Dios? ¿Me responderá Dios? ¿Cuánto tiempo tengo que esperar para saber que me escucho? Abraham demostró su fe con sus obras de obediencia, porque estaba dispuesto a sacrificar a su propio hijo, solo porque Dios se lo había pedido. Abraham le creyó al Señor y su fe se perfeccionó con sus obras, se le contó como Justicia y fue declarado amigo de Dios.

(v.25-26) Una mujer ayudó a los espías Israelitas porque creyó que Dios salvar su vida y salvaba a sus siervos. Ella se arriesgo y lo hizo. Cuando le creemos a Dios lo que nos ha dicho, eso nos impulsa a tomar riesgos y hacer lo que nunca habíamos pensado hacer - ¿Le crees a Dios? ¿Estás dispuesto a tomar riesgos en base a lo que te dijo? – La fe es hoy, es en tiempo presente, y de acuerdo a la revelación de la Palabra que hemos recibido, caminemos creyéndole a Dios aunque veamos todo en nuestra contra.

Si tu fe está muerta, es necesario inyectarle una buena dosis diaria de la Palabra de Dios como alimento e impregnarnos de la Presencia del Señor a través de la oración íntima con Él. Todo esto nos dará fortaleza para empezar a caminar conforme a la Palabra que hemos aprendido y entendido.

¿Tú fe está muerta? – Entonces clamemos a Dios para que nos de fortaleza en nuestro interior y resucite nuestra fe con Su poder – Créele a Dios y refléjalo en una conducta intachable que hace buenas obras, demostrando que tenemos una fe viva en Cristo Jesús.