jueves, 5 de enero de 2012

Clase 23 - GC 2011

PALABRAS DESTRUCTIVAS

Santiago 3:1-12

Hemos oído a través de la historia humana diferentes tipos de armas para destruirse o conquistar una tierra. Todos los instrumentos bélicos han ido evolucionando a formas inimaginables y cada vez son más destructivas. Pero aún con todos estos avances, jamás se podrá comparar con el arma mortal de la “Lengua”, es decir, nuestras palabras. Hay matrimonios y familias que están sufriendo las graves consecuencias de sus palabras hasta la fase final que es el divorcio y la desintegración.

(v.2) Todos en algún momento hemos fallado con nuestras palabras, y la Biblia nos enseña que debemos tener mucho cuidado, que debemos estar consciente del poder que hay en nuestra boca, porque hay vida o muerte, bendición o maldición con nuestras palabras. Es muy importante hacer el cambio en nuestra manera de hablar, pero todo comienza en nuestro corazón, porque nosotros hablamos de todo lo que guardamos en nuestras emociones.

Proverbios 4:23 – “Por sobre todas las cosas cuida tu corazón (emociones), porque de él emana la vida” – Éste versículo nos enseña que debemos cuidar nuestras emociones porque influyen en nuestras decisiones. Cuando las personas guardan amargura en su interior, se refleja en sus palabras y en las decisiones que toman para actuar. Emociones contaminadas y enfermas siempre tienden a hablar palabras negativas, ofensivas, anti sonantes, groseras, maldicientes y todo lo que se considere destructivo.

Las palabras amables y dulces calman el enojo de la persona con quien dialogas, pero si contestas con agresividad, tendrás como resultado agresión. Hay matrimonios que han fracasado en mantenerse unidos y felices por el descuido de emitir palabras irresponsables, sin control, sin dominio propio. No pueden salir palabras de bendición en un diálogo para ponerse de acuerdo cuando tus emociones guardas resentimientos, odios y rencores que terminan en una falta de perdón hacia la otra persona. Proverbios 15:1, 16:24, 25:15

Nuestras emociones son probadas cuando enfrentamos una circunstancia que nos hace enojar, ahí se puede notar que es lo que hemos guardado en ellas, porque nuestras palabras expresarán bendición o maldición, no hay más que esas dos. Debemos proteger nuestra vida y la de los demás con nuestras palabras, porque si lo hacemos a la ligera podemos traer la ruina o destrucción, Proverbios 13:3 - Es tiempo de reflexionar, ¿Cómo esta nuestra vida, matrimonio y familia, el trabajo, la economía, entre otras cosas? porque hay personas que en lugar de declarar vida en todas esas áreas, declaran muerte y destrucción. ¿Cómo son tus palabras?

--- ¿Estás dispuesto a perder y arruinar todo por no cambiar tus palabras? ---

Tus palabras no cambiarán mientras no decidas limpiar tu corazón a través del perdón y el arrepentimiento genuino, es decir, un arrepentimiento con un compromiso total con Dios. Pide perdón a Dios por todo la malo que has hablado y empieza a bendecir siempre a partir de hoy.